y sensaciones difícil de sentir…


Tus palabras me causaron heridas

que aún no logro sanar,

pero no te das cuenta.

Tu tacto cortó mi piel

y me hizo sangrar,

pero no te das cuenta.

Y ya no quiero oírte ni sentirte,

pero sí quiero,

es sólo que a veces duele,

aunque no te des cuenta.

Ya me estoy quedando sin palabras…


La cafetera suena,

está todo listo

pero no venís.

Y te esperé mil noches

y mil noches no estuviste.

Y te llamé mil noches

y mil noches no veniste.

La cafetera suena…

odio el sonido,

suena a mi vana espera,

a te quieros vacíos,

a amores sin sentido.

La cafetera suena y no venís.

Después de mucho pensarlo, a veces no quedan más opciones que retroceder…

Dejarte ir es la parte más difícil

si te extraño con sólo pensarte.

Me voy lejos por un tiempo,

debo alejarme.

Respirar es la parte más difícil

si trato de decirte adiós.

Contengo las lágrimas,

no quiero escucharte.

Y a pesar de mis sentimientos,

a pesar de mi lógica,

a pesar de mis deseos,

debo alejarme.

Es levantarse y darse cuenta que el clima te entiende, que sabe que una se siente miserable y sin ganas de ver a nadie o hablar con nadie…


Hoy no tengo lo que se necesita para ser sólo tu amiga

ni hablar gentilmente y sonreír sin pensarlo.

Hoy no quiero verte y tener que hablarte

si tengo que fingir que no siento lo que siento.

Hoy es un mal día para pedirme que sea yo

quien pretenda ser quien no soy.

Este sí es un poema de amor… espero…


Amanece,

la primera luz del día ilumina tu piel

y me parecés tan hermoso.

Acaricio tu espalda con mis dedos,

suavemente,

no quiero despertarte.

Beso tus labios gentilmente,

quisiera decirte cuanto te amo

y que te extraño cuando no estás.

Siento tu respiración sobre mi piel,

hoy no quisiera dejarte ir.

Suspiro profundo

mientras vaga en mi mente un pensamiento

¿estaré en tus sueños?

No le dije lo que sentía por usted, me va a doler el resto de la vida.

No le dije lo que sentía por usted, siempre me voy a preguntar si de alguna forma lo sabía.

Le dije lo que sentía por usted y me abrazó y me dijo que me amaba.

Le dije lo que sentía por usted y se quedó callado.

No te dije lo que sentía por vos, luego me di cuenta que fue una buena decisión.

Te dije, de alguna forma, lo que sentía por vos y me fue muy mal.

No le he dicho lo que siento por usted… todavía tengo dudas sobre si algún día lo haré.

A veces me despierto sintiendo que no soy yo, otras sintiendo que soy demasiado yo, otras sintiendo que no quiero ser yo, otras sintiendo que no debería ser yo.

¿Soy yo?

Para usted, ¿soy yo? No… no soy yo.

Para mi soy yo… el problema y la solución.

Había algo que quería decirle, pero ya se me olvidó… ok, no se me olvidó, es que me acobardé.

Lo mio no es problema de autoestima, es de inseguridad… y hoy descubrí que son cosas muy diferentes.

Yo trato, a veces… es sólo que es muy difícil.

Llanto controlado para defenderme del estrés y el cansancio emocional… por eso se prepara.

Ya no quiero.

¿Será que algún día pasará?

A veces me entristece estar contenta… a veces me contenta estar triste…

No soy rara… soy diferente… diferente es bueno.

Oscura… eso me gusta.

Las voces en mi cabeza vienen del mismo lugar pero piensan diferente.

Paso horas despierta cuando voy a dormir.

Siempre voy a pensar en vos.

Sigo respirando despacio y lo menos posible.

No soy lo que piensan… a veces.

Pocas veces son emocionantes.

Amo el terror y la música metal… pero es sólo coincidencia.

Indecisa, persistente, obsesiva, cobarde, leal, romántica, desesperante, apasionada, perfeccionista, impaciente…

A veces… feliz sin razón aparente.

[Continuará…]

Porqué cuando un@ cree que tiene un chance es cuando el tiempo se dedica a demostrarle cuan equivocad@ estaba…


Pensé que podrías amarme

y el tiempo confabuló con el destino

para despertarme de mi fantasía.

Pensé que podría olvidarte

y el tiempo otra vez,

implacable y vengativo, «nunca» me repetía.

Y en mi memoria las palabras y promesas,

temí que despertaría.

Y en mi piel las caricias y los besos,

creí que lo lograría.

Pensé que podrías amarme,

pero ya todo es una ilusión.

Y he tratado de olvidarte,

de superarte,

de dejar atrás las fantasías.

«Inútil esfuerzo»-

me grita el corazón.

Así se siente un fin de semana muy largo…


Hoy me desperté queriendo estar en tus brazos,

es extraño extrañarte y que no estés.

Me desvanezco entre mis pensamientos

y acostada en el suelo

mis ojos dejan salir las lágrimas

que mi alma reprimió.

Pero mis lágrimas no son por vos,

ni son por los tiempos pasados.

Soy yo la culpable de todo,

de mi miseria y fracasos,

de deseos no cumplidos

y esperanzas abortadas.

Y vuelvo a despertar sola,

sin tus brazos ni tus palabras,

pero siempre yo.

Acostada en mi cama,

la única luz que llega

es la de un viejo radio

en el que suenan canciones que me hablan de vos,

que me dicen que a pesar de que te fuiste

siempre vas a estar conmigo.

Pero ya no estás

y yo estoy bien.

Puedo escuchar canciones que me hablan de vos

y sonreír.

Porqué ahora todo está bien,

ahora, yo estoy bien

y las lágrimas desaparecieron

y las tristezas del adiós se fueron.

Y todo va a estar bien,

porqué te fuiste,

porqué a pesar de las canciones

ya no estás

y yo puedo sonreír.

La nostalgia por lo que ya no volverá…

Me cansé de extrañarte

y de estar acostada en el suelo de mi cuarto

esperando…

Escuchando canciones que me hablan de vos.

Me cansé de extrañarte

y de creer que lo imposible pasará,

llorando…

Sintiendo los recuerdos de tu tacto en mi piel.

Me cansé de extrañarte

y de no hacer nada más que ver televisión

esperando…

Creyendo que algún día esta sensación acabará.

Me cansé de extrañarte

y de sonreír ante la idea de tu regreso

llorando…

Temblando por la memoria de tus labios.

Me cansé de esperar

pero aquí sigo,

esperando…

llorando…

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